El verano está lleno de fiestas de todo tipo; fiestas de pueblos, de ciudades, patrones de ciudades, festivales de música… Pero hay una que destaca sobre todas incluso a nivel mundial, San Fermín. ¿Quien no conoce, aunque no haya estado, la existencia de este emblema de Pamplona?
Como donostiarras nosotros no vamos a ser menos que los navarros. Todos los meses de agosto la ciudad entera se viste de fiesta durante una semana entera para homenajear, en parte, a la Virgen. Pese a tratarse de festejos, juergas y charangas, tienen diferencias.
Las 10 Diferencias entre San Fermín y la Semana Grande de Donostia
- “Los toros en san Sebastián ‘escupen fuego’ y permiten a los padres y madres ser los héroes durante al menos 7 noches al año”.
- “Nuestros fuegos se montan a lo grande. Se hace una competición y todo para ofrecer a turistas y donostiarras el mayor espectáculo posible”.
- “El azul es el color de moda y no el rojo. Nuestro pañuelo azul conjunta perfectamente con nuestras tres preciosas playas”.
- “Durante la semana grande hay más donostiarras que turistas, al contrario que pasa en Pamplona en San Fermín, donde se oye más “Hey, where is the wine?” que, “tío, pásame el Kalimotxo”.
- “En san Sebastián no hace falta madrugar para ver a los toros correr. Solo necesitas esperar a después de los fuegos a eso de las 11 de la noche. Perfecto para verlo con la familia”.
- “Los toros, son toros de fuego, nos gusta el riesgo, vivir al límite”.
- “De la playa a la montaña para poder ver los fuegos, con un bocadillo entre las manos, el plan perfecto”.
- “¿Gente en la calle? La justa y necesaria, no vas a tener que pedir turno como en la carnicería para salir a la calle”.
- “Poder escuchar los conciertos desde la playa, no tiene precio”.
- “Actividades, conciertos y atracciones para todas las edades, no importa que tengas 15 años o 70, algo habrá pensado para ti”.
Seguramente nos dejemos muchas diferencias más pero tampoco es cuestión de dejar en mal lugar a la gran fiesta de Pamplona. Es broma, apreciamos mucho esta gran fiesta que es San Fermín, pero como donostiarras la Aste Nagusia y nuestra amada Tamborrada están por encima de cualquier cosa.El verano está lleno de fiestas de todo tipo; fiestas de pueblos, de ciudades, patrones de ciudades, festivales de música… Pero hay una que destaca sobre todas incluso a nivel mundial, San Fermín. ¿Quien no conoce, aunque no haya estado, la existencia de este emblema de Pamplona?
Como donostiarras nosotros no vamos a ser menos que los navarros. Todos los meses de agosto la ciudad entera se viste de fiesta durante una semana entera para homenajear, en parte, a la Virgen. Pese a tratarse de festejos, juergas y charangas, tienen diferencias.
Las 10 Diferencias entre San Fermín y la Semana Grande de Donostia
- “Los toros en san Sebastián ‘escupen fuego’ y permiten a los padres y madres ser los héroes durante al menos 7 noches al año”.
- “Nuestros fuegos se montan a lo grande. Se hace una competición y todo para ofrecer a turistas y donostiarras el mayor espectáculo posible”.
- “El azul es el color de moda y no el rojo. Nuestro pañuelo azul conjunta perfectamente con nuestras tres preciosas playas”.
- “Durante la semana grande hay más donostiarras que turistas, al contrario que pasa en Pamplona en San Fermín, donde se oye más “Hey, where is the wine?” que, “tío, pásame el Kalimotxo”.
- “En san Sebastián no hace falta madrugar para ver a los toros correr. Solo necesitas esperar a después de los fuegos a eso de las 11 de la noche. Perfecto para verlo con la familia”.
- “Los toros, son toros de fuego, nos gusta el riesgo, vivir al límite”.
- “De la playa a la montaña para poder ver los fuegos, con un bocadillo entre las manos, el plan perfecto”.
- “¿Gente en la calle? La justa y necesaria, no vas a tener que pedir turno como en la carnicería para salir a la calle”.
- “Poder escuchar los conciertos desde la playa, no tiene precio”.
- “Actividades, conciertos y atracciones para todas las edades, no importa que tengas 15 años o 70, algo habrá pensado para ti”.
Seguramente nos dejemos muchas diferencias más pero tampoco es cuestión de dejar en mal lugar a la gran fiesta de Pamplona. Es broma, apreciamos mucho esta gran fiesta que es San Fermín, pero como donostiarras la Aste Nagusia y nuestra amada Tamborrada están por encima de cualquier cosa.